Este martes 23 de abril de 2024 nos despedimos de un pequeño gigante, José Armando, un joven de 14 años que desde los 5 años libró una valiente batalla contra la leucemia linfoblástica.
Armando enfrentó con entereza más de 120 quimioterapias, soportando el dolor y las dificultades con una sonrisa que nunca se apagó. Su fortaleza inspiró a todos los que lo rodeaban, demostrando que incluso en los momentos más difíciles, la esperanza siempre puede florecer.
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La decisión de un guerrero: Detener el tratamiento
En octubre del año pasado, Armando tuvo una recaída. Los médicos le informaron que las nuevas quimioterapias serían más agresivas y dolorosas. Ante esto, el pequeño guerrero tomó una decisión difícil, pero que él consideraba la mejor para disfrutar del tiempo que le quedaba: detener el tratamiento.
“Prefiero divertir la vida”, dijo Armando con la valentía que lo caracterizaba. Su madre, Leonor Guzmán, respetó la decisión de su hijo, entendiendo que su felicidad era lo más importante.
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Un sueño cumplido: ¡Gran fiesta de cumpleaños!
A pesar de la dura enfermedad, Armando nunca perdió la alegría. Uno de sus grandes sueños era tener una fiesta de cumpleaños, algo que nunca había podido celebrar debido a su condición.
Ante su deseo, la familia pidió apoyo en redes sociales y la respuesta fue conmovedora. Personas de todo el país se unieron para hacer realidad el sueño de Armando. El 24 de febrero, el pequeño guerrero pudo disfrutar de una fiesta llena de música, comida, dulces, juegos y mucho amor.
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José Armando, un aficionado del Cruz Azul
Armando era un gran aficionado del Cruz Azul, y su mayor anhelo era conocer a los jugadores del equipo. El club, al enterarse de su historia, no dudó en buscar cumplir su sueño, pues a través de sus redes compartió “Lo haremos, pequeño”.
Un legado de fortaleza y alegría
José Armando nos deja un legado de fortaleza, valentía y alegría. Nos enseñó que incluso en las situaciones más difíciles, podemos encontrar la felicidad y disfrutar de cada momento. Su sonrisa y su espíritu guerrero vivirán por siempre en nuestros corazones.
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