Al menos 57 reses murieron a causa de una “extraña enfermedad” en algunos municipios de Hidalgo, aunque el tema se manejó con discreción, las autoridades sanitarias descubrieron los múltiples decesos por lo que levantaron una alerta ante posible carne en mal estado.
El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) revisó los municipios de Acaxochitlán, Acatlán, Agua Blanca, Tulancingo y Metepec, lugares donde se presentaron reses muertas con una misma característica.
¿De qué murieron las reses de Hidalgo?
De acuerdo con la Senasica, las reses murieron por postración, lo que significa excesiva producción de saliva y movimiento excesivo de extremidades, Luis Alberto Mercado, comisionado para la Protección Contra Riesgo Sanitario de Hidalgo, reveló que tras los reportes se activó una serie de protocolos para fortalecer la vigilancia sanitaria de rastros, de casas de matanza y de carnicerías.
La Senasica explicó que las muertes fueron a causa del consumo de alimentos con pollinaza, la cual contiene excrementos de pollo, aserrín, a menudo plumas y restos de alimentos, que se producen en algunas granjas.
¿Qué pasó con las reses muertas en Hidalgo?
Las autoridades explicaron que los animales contaminados se enterraron bajo recomendaciones sanitarias para evitar algún tipo de aprovechamiento. Asimismo revisaron 33 carnicerías y 25 centros de matanza, de donde fueron decomisados 350 kilos de carne, aunque ninguna correspondía a los animales que murieron por enfermedad.
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