Traducido del inglés como cuidado de la piel, el skincare consiste en la serie de métodos, productos y rutinas que seguimos para mantener una piel hidratada, bonita y saludable. Tomando en cuenta que existen muchos tipos de piel, cada persona puede adaptar la rutina, agregando y quitando productos, de acuerdo a sus necesidades. Sin embargo, es importante conocer la diferencia entre una rutina de día y una rutina de noche para obtener mejores resultados.
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¿Qué tipos de piel existen?
No todos los productos son aptos para todo tipo de piel, es por eso que es importante que conozcas qué tipo de piel eres para que puedas seleccionar mejor aquellos artículos que te darán mejores resultados. Existen muchos tipos de piel, pero los más comunes son cuatro:
- Piel grasa. Esta se caracteriza por producir más sebo de lo normal, lo que hace que nuestra piel luzca más brillante.
- Piel seca. Esta piel luce apaga y reseca, incluso hay ocasiones son se ven líneas.
- Piel normal. Esta piel es uniforme, ni muy brillante, ni muy apagada.
- Piel mixta. Esta es una combinación entre las dos primeras, pues hay zonas donde predomina la producción de grasa y otras donde lucen secas.
¿Cuál es el orden de los productos para una rutina correcta de skincare de día?
- El primer paso es la limpieza. Teóricamente no deberías dormirte maquillada, por lo que el desmaquillarte es un paso que se omite durante la mañana; sin embargo, lo que sí debes de hacer es lavarte la cara con un jabón facial o un limpiador facial adecuado a tu tipo de piel.
- Después sigue la preparación de la piel. Esto lo hacemos a través de un tónico facial, ya que esto permite que los siguientes productos de la rutina puedan penetrar mejor en el cutis.
- Ahora es momento de aplicar los sueros. Existen una gran variedad de acuerdo a sus funciones, debes de buscar el más adecuado de acuerdo a tus necesidades.
- Llega el momento en el que puedes aplicar un sérum o gel para ojos; al igual que el facial, este tiene diferentes funciones, ya sea la hidratación, combatir las líneas de expresión, etc.
- Si tienes algún tratamiento especial, como para el acné o las manchas, este es el momento adecuado para aplicarlo (debes acudir con tu dermatólogo para verificar que sean productos que puedes utilizar durante el día).
- Finalmente ha llegado el momento de sellar todo mediante un hidratante facial, este puede ser en gel o crema.
- Lo más importante es que no olvides colocarte el protector solar al final, pues esto es lo más importante para el cuidado de la piel, incluso si vives en zonas frías o nubladas.
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