Con los drásticos cambios de clima, es muy importante cuidar nuestra piel para evitar que se maltrate o sufra los efectos del mal tiempo, sobre todo la piel del rostro que mucho más sensible y es la que está más expuesta a recibir el frío, el viento, la lluvia y la nieve, el sol, suciedad y polvo; por estas razones te compartimos una rutina que te podría ayudar al cuidado de tu piel para que siempre luzca hermosa, pero sobre todo que esté sana.
¿Cómo puede dañar el frío mi piel?
Algunos especialistas en dermatología explican que el frío hace que tengamos una lenta circulación sanguínea, por lo que la piel se deshidrata con mayor facilidad, se ralentiza el ciclo de renovación de las células cutáneas y por eso se ve seca, opaca, agrietada y se puede llegar a descamar.
En casos más delicados se pueden producir algunas lesiones como:
- Sabañones
- Eczemas
- Sequedad
- Tirantez
- Rojeces
- Psoriasis
- Dermatitis atópica
¿Cómo puedo cuidar mi piel del frío y los cambios de clima?
Durante la época invernal existen algunos tips que puedes poner en práctica, estos hábitos no pueden faltar en tu rutina diaria;
Buena limpieza de la piel
Esto es básico para tener una piel saludable, sobre todo la del rostro, así que debes de iniciar tu rutina con la higiene facial, incluso si te bañas, debes utilizar agua templada, pues quizás por el frío somos más propensos a bañarnos con el agua muy caliente, y esto dañara tu piel drásticamente.
Asegúrate de usar un limpiador facial suave, que respete al máximo la barrera cutánea y reseque tu piel lo menos posible.
Usa una buena crema hidratante
En época de frío la piel suele resecarse mucho, así que te recomendamos utilizar una crema hidrante para que tenga un escudo extra ante las agresiones del clima. Recuerda que la del rostro debe ser diferente a la del resto del cuerpo, pues para el cuidado facial debes tomar en cuenta tu tipo de piel, mientras que para el resto del cuerpo puedes elegir una con aceites naturales.
Hidrátate con suficiente agua
Es importante que consumas muchos líquidos durante el invierno, pues es la forma natural de aportar hidratación a todo el organismo, y claro, la piel se beneficia de ello, así que recuerda tomar de 2 a 3 litros de agua simple al día.
Usa bloqueador solar
Sí crees que por ser invierno y tener días nublados el sol no daña, estas en lo incorrecto, pues si hacer recorridos al aire libre o caminas expuesto en las horas más intensas, te podrás topar con radiaciones ultravioletas, que aunque afecten menos ahí están, por lo que no debes confiarte y tienes que utilizar tu bloqueador solar.
